Ingenieros de la universidad de Stanford han logrado crear paneles solares ultradelgados y con alta flexibilidad a través de materiales denominados metales de transición dicalcogénicos (TMD) que contienen elementos amigables con el medio ambiente. Por ahora, su eficiencia iguala a productos delgados creados a partir de de silicio, el cuales el material principal con el que se producen la mayoría ee paneles en el mundo y se espera que aumente con el desarrollo de la tecnología. La buena noticia es que se ha logrado crear este tipo de material con grosores iguales al de una bolsa plástica y ello permitiría ser adicionados en construccciones, ropa, electrónicos portables, ventanas, drones y vehículos eleéctricos entre otros.
El desarrollo de alternativas para captar energía solar es uno de los retos más importantes en la presente década . Este diseño presentado por la universidad de Stanford imita a la naturaleza en usar materiales poco frecuentes en cantidades menores para así ser amigable con la vida, usar formas ultradelgadadas y flexibles tal como las hojas de las plantas superiores y ser eficientes en convertir la energía solar en otro tipo que permita el funcionamiento ya sea del organismo en el caso biologico o del panel solar. Sin embargo, hasta hoy no se ha podido incrementar la eficiencia más allá del 5%, en cuanto las plantas lo hacen en valores del 26-27% (total en la fotosíntesis). Esto muestra que tenemos mucho camino por andar para comprender como aprovechar la energía solar de la mejor manera posible.